Lindo y bueno, más no barato: la nieve más cara del mundo está en Neuquén y Río Negro

Se sabe que esquiar y hacer snowboard en la región es una opción que la mayoría de los patagónicos no tiene. Si se agrega un escenario inflacionario constante y de incrementos tarifarios, es probable que esa brecha se siga angostando.

Pero todavía hay más: Argentina; y en particular Neuquén y Río Negro, será este año uno de los países más caros del mundo para los deportes de nieve, sino el más oneroso, de acuerdo a una evaluación y comparación de precios de los pases/tickets/forfaits de la temporada 2016 de resorts invernales de América y de Europa.

No es tanto el aumento interanual en las montañas locales, que llega a casi el 35 por ciento (34,81%) y que se corresponde más o menos con la inflación anual del país (*). Lo que llama la atención es que centros de ski como Catedral o Chapelco, por citar a los dos con el tarifario más alto, se encuentren igual o por encima en muchos casos de centros de nieve tradicionales, con mayor cantidad de servicios y opciones y con montañas y calidad de nieve aseguradas durante varios meses al año.

Ambas montañas coincidieron, como es casi habitual, en el costo del pase diario mayor: en alta costará $1.065, frente a los $950 de Cerro Bayo en Villa La Angostura, $890 de Caviahue, $920 de Las Leñas en Mendoza o $985 de Cerro Castor en Tierra del Fuego, por citar algunos ejemplos (**).

Comparación

El análisis se realizó tomando siempre como referencia el valor de un pase diario para un adulto en el tramo más caro del invierno (temporada alta). Las cotizaciones del dólar ($14,64) y del euro ($17,58) utilizadas corresponden al cierre del mercado cambiario argentino del 25/04. Solo se tuvo en cuenta el pase y no el alquiler de equipos, alojamiento, traslado, comidas ni esparcimiento (en tal caso, la diferencia hubiera sido más importante aún).

En Chamonix, Francia, a los pies del Mont Blanc, el mismo pase cuesta $1.055 (60€), en el bello Val-d'Isère $950 (54€) y en Courchevel es un poco más barato, $896 (51€).
En Andorra, los centros de esquí de Vallnord tuvieron un forfait diario de $598 (34€) y los de la empresa Granvalira de $809 (46€). En España, el tradicional Sierra Nevada lo llevó a $809 (46€).

Aún Chamonix, en términos nominales es más barato que Chapelco o lo que costará Catedral en el inminente invierno. Y es Chamonix, dicho con todo el cariño que se le tiene en la Patagonia a las montañas “de acá”.

En Suiza, el pase diario adulto en Gstaad fue de $1089 (62€) y en St. Mortiz de $1441 (82€) un poco más caro pero con opciones con muchos horarios: los pases pueden adquirirse por horas, como sucede en muchos grandes resorts invernales del hemisferio norte. Quizás Courchevel y sus forfaits por tres horas sean el mejor ejemplo.

En América del Norte hay más ejemplos de buenas oportunidades para disfrutar de la nieve en inmejorables condiciones. En cualquiera de las estaciones cercanas al lago Tahoe, en el límite de los estados norteamericanos de Nevada y California, los pases más caros cuestan 79 dólares en ventanilla, pero 69 si se lo adquiere on line ($1.156 y 41.011, respectivamente; en Mt, Rose).

En el canadiense y grandioso Whistler Blackomb, sede de todas las pruebas de ski y snowboard de los XXI JJOO invernales de Vancouver 2010, el pase cuesta 69 dólares en ventanilla y 63 por internet ($1.011 y $922) pero con dos grandes innovaciones: la primera es que Whistler tiene siete temporadas diferenciadas para la adquisición del pase, con sus respectivas tarifas. Y la restante es un “seguro de nieve”, que se traduce en que cada cliente disfrutará de la cantidad de días de pase que adquiera. Si no hay nieve, o el clima no permite el uso de los medios de elevación, la empresa se garantiza que los mismos podrán ser utilizados en cualquier otro momento de la temporada, sin costo extra alguno para el esquiador. En casi todo el mundo, pero especialmente en Argentina, si no hay nieve, si se cortó el servicio eléctrico o si un blizzard (***) no permite el uso de la montaña, el pase se pierde. No hay derecho al pataleo.

Por último, una referencia a un centro de deportes invernales de los más tradicionales de EE.UU. como Aspen, donde el pase diario cuesta 69 dólares ($1.011).
Evaluado en términos absolutos, hay centros de deportes invernales desparramados por las montañas del mundo –que son no muchos, pero tampoco pocos- con tarifas más caras que las de Chapelco y Catedral. Sin embargo, en términos relativos, es decir, conjugando tarifa frente a servicios ofrecidos, definitivamente las montañas de Neuquén y de Río Negro son las más caras del mundo.

En síntesis, la tendencia a convertir a los centros invernales más grandes de Neuquén y Río Negro en dos de los más costosos en todo el globo se ve afianzada como nunca en esta inminente temporada invernal 2016.

A todo esto, hay un fantasma recorre la espalda de los prestadores turísticos cordilleranos, como la escarchilla traicionera que se cola por la campera: las tarifas 2016 de la nieve chilena. Por mencionar tres estaciones cercanas a Neuquén, el pase en Termas de Chillán costará $18.000clp (pesos chilenos, casi 26 dólares o $380) en Ski Pucón $20.000clp (28,5 dólares o $417) y en Las Araucarias $25.000clp (35 dólares o $512). No hacen falta muchas conclusiones al respecto.

Aún así, las tarifas carísimas quizás no sean el peor problema. El más complicado de desmontar parecería ser la inagotable insistencia en un modelo de negocios que no hace foco en la posibilidad de captar más esquiadores a las montañas, sino en mantener un status quo de clientes que garanticen la continuidad del negocio hasta convertir a los deportes invernales en una “amenidad” más de los desarrollos inmobiliarios in progress, que parecen ser el destino final de estas inversiones cordilleranas.

(*) En 2015, el pase diario adulto en alta temporada costó $790 tato en Catedral como Chapelco. En 2014, el costo fue de $585.
(**) En el caso de Bariloche, la tarifa fue solicitada por la empresa ante el Ente Autárquico Fiscalizador del Cerro Catedral (Eamcec) Por contrato, el pase diario adulto en alta no puede superar a la tarifa de Chapelco. Puede ser más barata, aunque ese caso no se da casi nunca.
(***) El término hace referencia a las tormentas de nieve en la montaña; a modo de homenaje al austríaco Alfred Auer, quien durante años fue director de la escuela de esquí&snowboard de Chapelco; y quien aún se dedica a la nieve en San Martín de los Andes)

Neuquén Al Instante