Desarrollar la infraestructura para que Vaca Muerta pueda seguir creciendo

Comenzó su intervención refiriéndose y agradeciendo los lazos y el conocimiento: “Argentina se favoreció con las experiencias de Estados Unidos. Aprendimos de lo realizado en los pozos de Norteamérica. Ese know how nos permitió un desarrollo más rápido de Fortín de Piedra. Tanto, que sorprendimos a los propios estadounidenses”.

Lazos de crecimiento y de proyecciones que se topan con las distintas realidades: “Fueron tan buenos los resultados del gas y el petróleo en Vaca Muerta que se saturaron las capacidades de transporte. Ese tiene que ser el primer paso en la agenda próxima: desarrollar la infraestructura para que pueda seguir creciendo. En petróleo tenemos el proyecto de ampliación del oleoducto de Oldelval, que nos permitirá pasar de 226.000 barriles por día a 450 mil, la ampliación de la terminal portuaria y la rehabilitación de OTASA. Pero si sumamos las nuevas capacidades que lograremos aprovechando estas instalaciones, no vamos a llegar a lo que necesitamos. Antes de 2030 va a ser necesaria la construcción de un tercer oleoducto”.

Pasos del presente hacia el futuro: el gas como el jugador principal, líder de la transición energética. La región se encuentra ante una primera etapa fundamental: “Tenemos que sustituir muchas importaciones. Tenemos la chance de exportar gas y electricidad hacia Chile y Brasil. Para esto, también son necesarias muchas interconexiones. Las reservas de nuestro país son más que suficientes, solo nos queda trabajar para conectar Vaca Muerta con el mundo”.

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